MOVIMIENTO MISIONERO MUNDIAL EN EL SALVADOR

Esta reflexión es muy personal. Espero que puedan entender lo que intento transmitir a través de las siguentes líneas de texto, un sentimiento que no sé si solo a mí me ha ocurrido o alguién más lo ha experimentado.

 

La verdad es que cuando aceptamos a Cristo, El nos hace promesas grandes. El desde antes de que fuesemos tan siquiera concebidos, ya tenía un plan ara cada uno de nosotros. Si que nosotros interviniéramos, El ya tenía predeterminado algo para cada uno de nosotros los que hemos abierto el corazón a Jesús.

 

Pero acá está el detalle... TODOS (sin excepción) tenémos un propósito. No importa inclusive nuestro pasado o presente, Dios se interesa y nos ve a futuro. El es un Dios que no se apresura, El es un ser que no se preocupa ni se aflige como nosotros. El tiene todo medido.

 

Pero en cambio nosotros, los que somos Hijos de Dios a través de Jesucristo, en especial los jóvenes, nos preocupamos por el futuro. El hombre por naturaleza es un ser lleno de afanes, se preocupa por cosas que aún no han pasado, se siente derrotado sin antes intentar vencer, etc. Estos sentimientos son los que quiero describir a continuación.

 

Permíteme preguntar: ¿Alguna vez alguién te ha dicho lo especial que eres para Dios y de las cosas grandes que te esperan en El y por tu mente pasó el pensamiento "eso no es cierto"? De eso quiero hablar. Quiero dirigirme a aquellas personas que NO CREEN QUE DIOS TIENE ALGO GRANDE PARA ELLOS. Para aquellas personas que tienen miedo de soñar, de volar más alto, de esforzarse por miedo al fracaso o a la burla, que se dejan vencer fácilmente por la adversidad, por aquellos que creen que no valen nada y se sienten frustrados, miserables y solos.

 

Es a ti quién está dedicada esta reflexión. Quiero invitarte a que en este momento recapacites y te des cuenta de tu verdadero valor. El diablo y tus enemigos atacan tu mente y quieren hacerte flaquear en la fe. Hacen que veas a otros mejores que tu, quiere que creas que jamás alcanzarás nada, que nunca serás alguien en esta sociedad, que nunca obtendrás esos sueños que tienes en tu corazón.

 

Posiblemente tienes deseos de obtener un trabajo, casarte, formar un hogar, alcanzar cosas grandes, ser una mejor persona o vencer algo que te está atando, si quieres alcanzar cosas grandes en Dios, déjame decirte que LOS PUEDES LOGRAR CON DIOS DE TU LADO.

 

Es hora de que te levantes, que busque ayuda, que salgas de esa psicósis que te encierra, que escapes de ese laberinto de torturas psicológicas que atormentan tu alma y no te dejan ser feliz. Es hora de que reconozcas que no importa tu condición actual, si no tienes lo que quieres, si no haz logrado aún lo que deseas, recuerda que DIOS TIENE PARA TI COSAS GRANDES, se oponga quién se oponga.

 

Dios te ha dotado de talentos, virtudes y dones maravillosos. Tú no los logras ver porque estás ofuscado y tu visión se nubla por los sentimientos de inferioridad, culpa, inutilidad, pero eso no significa que seas un perdedor. Eres más que vencedor en Cristo y los demás lo notan en tí, ¿por qué no lo notas tu también? La gente te dice que eres especial, y sabes una cosa... ¡DIOS CREE EN TI! Es por eso que estás pasando problemas y estos pensamientos te atacan, porque el diablo sabe quién llegarás a ser si te mantienes fiel a Dios.

 

El enemigo no desea verte prosperar, porque TU le vas a pisotear la cabeza a el en el Nombre de Jesús. Tu eres una parte valiosa del Cuerpo de Cristo, tu vales mucho. Es por eso que te invito a que sigas adelante, a que nunca renuncies a tu llamado. EL TIENE UN PROPÓSITO PARA TU VIDA. Así que adelante.