MOVIMIENTO MISIONERO MUNDIAL EN EL SALVADOR

Joás, El Rey de Israel de ese momento llegó a ver a Eliseo, el profeta de Dios que se encontraba en esos momentos en su lecho de muerte. El fue a buscarlo porque quería saber si iba a poder hacerle frente al ejercito Sirio.

El profeta le ordena que tome unas cuántas flechas en su mano y que comience a golpear la tierra con ellas. El rey lo hizo tres veces y se detuvo. El profeta Eliseo lo mira con disgusto y le reclama diciendo que si hubiera golpeado cinco o seis veces la tierra con las flechas, Israel destruiría a Siria por completo, pero como solo tres veces golpeó, solo tres veces vencería. Y así fue, solo tres veces Israel le ganó a Siria y después no pudo hacerle frente a ellos.

¿Qué tiene que ver esto con nosotros? Bueno. La vida demanda que le hagamos frente a muchas situaciones difíciles. Para lograr algo en la vida debemos esforzarnos. Aquellas personas que se quedan sin hacer nada el resto de sus vidas terminan siendo fracasados, gentes que no lograron nada porque jamás pusieron de su parte por alcanzar lo que deseaban.

Aquellas personas que se esfuerzan alcanzan lo que desean. Ejemplo: aquellos que estudian, que con sacrificio logran sacar una carrera universitaria o de estudios superiores, verán sus esfuerzos coronados cuando estén trabajando en aquello para lo que fueron capacitados. Así en la vida espiritual, esta demanda esfuerzo, sacrificio, abnegación. Demanda de nosotros una actitud de guerreros, de gente que luche por lo que anhela, por alcanzar sus sueños.

Hoy quiero dedicar esta reflexiónhacia aquellas personas que han dejado de intentarlo, aquellas que se han retirado de la lucha, que decidieron abandonar sus metas y aspiraciones y que hoy están frustadas. Quiero hablar también a aquellos que están luchando, pero que se encuentran cansados, que sienten que sus fuerzas ya no dan más.

Quiero decirle a todos aquellos que ya no quieren seguir golpeándo, que ya no quieren seguir avanzando, en especial a los jóvenes que han iniciado este camino pero que ya no quieren continuar, quiero animarlos a seguir adelante y a no rendirse.

Quizás has comenzado este camino con gozo, pero ha llegado a ti la prueba, esa que quiere detenerte e impedirte avanzar. Quizás la enfermedad, los problemas, las tentaciones, etc. quieren que no crezcas en Dios, pero hoy es el momento de seguir golpeando las flechas contra el suelo.

Si el rey Joás hubiera segido golpeándo la tierra hubiera alcanzado lo que deseaba: vencer a los sirios. Sin embargo, como se detuvo, solo lo hizo unas cuantas veces. ¿Por qué a veces no alcanzamos lo que tanto deseamos? Porque no seguimos golpeándo. Nos rendimos fácilmente, nos cansamos muy pronto, pero eso debe de cambiar en este día.

Es momento que retomes las flechas en donde las dejaste. Que con humildad te arrodilles y golpees el suelo, en señal de que estás dispuesto a avanzar. ¿Qué es lo que quieres lograr en la vida? Es momento de volver a intentarlo, de levantarse y salir de la zona de la comodidad y esforzarnos nuevamente por lo que deseamos.

NO te desanimes si te cansas, es normal que lleguen momentos así, pero recobra las fuerzas, toma aire y sigue golpeando. Tarde o temprano la victoria alcanzarás. Quiero dejar este video que espero confirme estas palabras sobre tu vida. No te rindas, avanza. Dios está contigo.